Unos gritos alocados de repente nos sacaron de la sala donde estábamos saboreando un copiosísimo desayuno. En la planta de abajo, a los pies de la escalera, una chica vestida con un traje de época se agitaba y gritaba tendida en el suelo:
– Pero bajad …. ¡ay ay!….pero venid a ayudarme…..¡ay ay! … pero bajad ¿qué hacéis allí arriba …. ¡ayudarmeeee…!
Y así empezó nuestra aventura . Al poco nos encontramos en la terraza trasera, delante de unas colinas cultivadas a viña hasta donde la vista alcanza, un espectáculo que la naturaleza tan agradecida nos devuelve con mucho mimo. Los dos carteles que el día anterior habíamos rellenado los dos equipos estaban colgados de dos columnas portantes y Jose nos volvió a explicar que los equipos que habíamos formado la víspera, SMILE y SUCCESS, se llamarían también del NORTE y del SUR e íbamos a competir en una serie de juegos que la pareja vestida de época, dos actores, iban a capitanear.
El éxito o el fracaso de cada juego se debía a una serie de circunstancias, que nos enseñarían en la practica cómo elegir el rol de cada concursante según sus habilidades, y que todas por separado, si bien detectada y bien empleada, servirían para formar un equipo unido y competitivo. Y lo interesante era ver que a cada juego cambiaban los resultados según íbamos repartiendo bien el rol a cada uno y desde luego es muy importante localizar al jefe, que es el que al final tiene el poder decisional, pero que también el líder puede ser otra persona del equipo y que en cada proyecto puede ser uno diferente y que la responsabilidad del éxito o del fracaso es repartida entre todo el equipo.
Fue un día inolvidable, divertido y muy interesante, con una exquisita comida, mucho cariño y buen feeling. A lo largo del día fuimos catando también los vinos de la pequeña pero primorosa bodega: Alvarez Nölting. Al final del día pudimos también tener acceso a la compra de algunas botellas.
He echado mucho de menos en este espacio de tiempo el buen rollo que hemos conseguido entre todos. La reflexión de lo que aprendimos en este día y a lo largo del curso, que va adquiriendo cada vez más fuerza, me ha dado mucha seguridad y confianza para empezar un cambio en mi forma de ser y de pensar. Esta ha sido una época para mi de mucho trabajo, de crear y organizar varios eventos, como todos los años, en el periodo navideño pero me he dado cuenta de que los estoy emprendiendo de manera diferente, intentando poner en practica lo aprendido, y tengo que reconocer con mucho orgullo que el resultado ha sido muy diferente. No solo en números, sino en la percepción de tener el control de las decisiones. Está claro que es un largo recorrido, que esto no ha hecho más que empezar, que hay que estudiar mucho y practicar mucho, pero querer es poder. Así que……. adelante con la marcha puesta hasta donde pueda llegar.
Dora de Teresa es una persona muy especial, una coordinadora excelente y ha sabido rodearse de un equipo competente pero a la vez cercano y que sabe crear una sinergia entre todos los participantes de verdadero equipo.
Me apunté a este curso por el entusiasmo que Dora sabe transmitir, por ese optimismo tan contagioso que sin ello es imposible alcanzar la felicidad, y por la curiosidad que despierta una persona que ha sabido reinventarse con tanto éxito como ella. Pero al poco me he dado cuenta que el curso era lo que yo estaba necesitando para poder crecer como persona y en mi trabajo. Y además, siendo autodidacta, me está dando la seguridad que seguir mi instinto es muy positivo en la mayoría de las cosas que hago.
Me siento una persona muy afortunada por haber conocido personas tan positivas y tan diferente de mi entorno habitual, y desde luego muy agradecida por haber formado parte de este equipo tan estupendo.